El presente trabajo de Didáctica de la
Lengua Española, se trata de plantear una actividad oral en gran grupo para
alumnos de 6-7 años del curso de Primero de Primaria, para trabajar una conversación-diálogo
o debate, que permita la puesta en común de distintos puntos de vista así
como posibles soluciones, o respuestas llevadas a cabo por los niños de la
clase. Intentaremos que participen todos en igualdad de condiciones. He elegido
el tema de la Diversidad. Creo que
es un tema que a través de un cuento, puede resultarles muy motivante y
didáctico para comprender las desigualdades. Los niños y niñas a estas edades,
es importante que reflexionen sobre que no todos somos iguales y que con ello
podemos fomentar la igualdad, la inclusión, la solidaridad, el compañerismo y
toda una serie de valores que han de tener en cuenta ya no sólo con sus
compañeros del aula, sino de cara al futuro y a la vida en general.
En la escuela la diversidad es algo positivo, es
fundamental para enriquecernos de los demás y construir nuevos proyectos e
ideas. Los alumnos crecen y se forman como personas si saben apreciar las
diferencias que tenemos cada uno de nosotros. La diversidad impera en todos los ámbitos de
nuestra vida, no solo en el ámbito escolar, cuando nos hacemos adultos y nos
enfrentamos a la vida laboral este hecho se hace mucho más evidente y hemos de
tener los suficientes recursos para aprender a vivir con ello. Si nuestros
hijos o alumnos no son capaces de ver esto, es importante plantearnos cómo
hacer para mostrarles este hecho.
Introducir a los niños en este tipo
de actividad oral, argumentando contenidos o ideas, permite que el alumno
desarrolle la competencia comunicativa y desarrolle destrezas básicas como
escuchar, hablar, leer y escribir. Al tiempo a nosotros nos permitirá
enseñarles una correcta utilización del lenguaje, haciéndoles que trasmitan de
forma clara, ordenada sus sentimientos, vivencias, ideas y opiniones, algo que
considero muy importante a la hora de educar y tener presente en el aula desde
los primeros momentos de la Educación Primaria.
2.- Planteamiento de la Actividad.
Una de las premisas iniciales que
debemos tener en cuenta es que a partir del tema planteado, queremos desarrollar
la competencia comunicativa; debe existir una reciprocidad comunicativa entre
los alumnos, es decir, diálogo. Según Piaget, hacia los 6-7 años, es el momento
adecuado para iniciar intercambios comunicativos. A partir de una motivación
que propondremos, intentaremos desarrollar esta competencia comunicativa
básica, objetivo básico a desarrollar en la Educación Primaria. Tenemos pues,
que propiciar una interacción (Rocío Linecos Quintero: Comprensión y expresión de textos orales”) con alternancia en los
turnos que permita que los niños con su participación vayan modificando su
mensaje, lo reafirmen o lo cambien, según vayan observando las reacciones u
opiniones de sus compañeros.
El
contextoen donde se desarrollará el debate será en el aula, con los
niños y niñas organizados en asamblea para que puedan ver correctamente al profesor, al tiempo que puedan captar los
mensajes e informaciones de sus compañeros; a la vez que el niño o la niña que
habla, sea consciente que le están escuchando sus compañeros. Esta disposición
permite ver a todos sus compañeros, relacionarse entre todos y facilitar la
comunicación. El aula será el lugar para llevar a cabo esta práctica.
Antes de realizar la actividad, de conversación-diálogo o debate,
recordaremos o dejaremos claro toda una serie de normas y de convivencia. Debe existir, respeto hacia ideas y
opiniones distintas, todos serán libres para exponer sus ideas con respeto al
tema planteado; comunicarse de forma adecuada no sólo en cuanto a contenidos
sino también en cuanto a trasmitir emociones, sentimientos; hablar claro,
pronunciar adecuadamente por lo que para ello no expondremos nuestras opiniones
de forma alterada, rápida, impulsiva o incluso en voz baja que no nos puedan oír
o comprender; respirar adecuadamente; saber escuchar, no oír, pues escuchar
conlleva interpretar, entender el mensaje que nos están trasmitiendo.
Explicarles, que muchas veces oímos pero no escuchamos, por lo tanto han de
poner especial atención en conseguir escuchar al compañero o compañera que nos
habla. No gesticular en exceso. Para tomar la palabra habrá que pedir la vez,
levantando la mano. Es importante establecer el turno de palabra, para generar
un orden, compromiso y escucha. No hacer conversaciones a partes, es decir
hablar con el de al lado o en pequeños grupos. El diálogo no es una pelea de
ideas ni un “a ver quién puede más”. El diálogo es una indagación sobre una
cuestión ni tampoco es “contar mi vida”.
Estas normas vendrían a dejar claro lo que pretendemos hacer antes de
realizar la actividad, motivar a los alumnos a través de la expresión oral,
haciendo que el contexto, la situación donde la desarrollemos sea estimulante,
a través del tema que queremos tratar, que ellos se sientan importantes a la
hora de conseguir los objetivos a través de la narración del Cuento El Burrito albino.Pretendemos en
definitiva conseguir los siguientes Objetivos
a trabajar en el aula:
-
Adecuar
el mensaje, el tono la entonación.
-
Enriquecer
el vocabulario.
-
Corregir
la pronunciación
-
Elegir
las palabras adecuadas o pertinentes.
-
Contar
experiencias propias.
-
Narrar
cuentos.
-
Reflexionar
-
Valorar
la diversidad como algo enriquecedor
-
Las
diferencias no nos separa, nos debe unir
Una vez dejadas claras las normas y lo que pretendemos hacer
preguntaremos…¿creéis que somos todos iguales?... ¿Qué importa más el aspecto
exterioro cómo somos?...¿tenemos todos los mismos derechos?...Preguntas
introductoras, que nos adentraría en el mundo de la diversidad, que podemos ser
distintos pero que todos somos y debemos tener los mismos derechos. Que la
educación es inclusiva.
3.- Un ejemplo de actuación ante un
alumno con Necesidades Educativas Especiales.
Hay niños que requieren atenciones especiales, es decir necesitan en
educación tienen Necesidades Educativas
Especiales, alumnos en situación de riesgo social, alumnos con Altas Capacidades,
alumnos inmigrantes, de otras culturas y lenguas,alumnos con Trastornos Graves
de Conducta, de Trastornos Autistas (TEA), con Discapacidad Visual (DV), Discapacidad
Motora (DM) o Auditiva (DA) o Discapacidad Intelectual (DI), o alumnos con
Déficit de Atención (TDAH) o con Dificultades para el aprendizaje (DEA)… o
simplemente alumnos más o menos motivados o interesados para el estudio. Cada
uno de ellos es distinto al de al lado. Cada uno requiere intervenciones
distintas de actuación el aula, algunos necesitan apoyos especiales y otros no.
El maestro ha de ser capaz de poder atender las necesidades de cada uno de
ellos y poder ofrecerles lo que necesitan en cada momento. Ésta no es una tarea
fácil pero necesaria e importantísima.
Podríamos poner un ejemplo de actuación de forma muy resumida de una
forma de actuación ante un alumno con Discapacidad Visual, bien por ceguera
total o parcial.
La Atención a la Diversidadforma parte del Proyecto
Educativo de Centro, que recoge las decisiones de actuación a la Diversidad.
Son modificaciones o provisiones de recursos espaciales, materiales, personales
o de comunicación que van a facilitar que alumnos con necesidades educativas
especiales puedan desarrollar el currículo ordinario. Pongamos un ejemplo qué
podríamos, de forma muy sucinta, qué hacer ante un alumno con Discapacidad Visual, bien por ceguera total
o parcial. Entre las actuaciones
podríamos destacar:
-
Ofrecer el
brazo si fuera necesario, caminando delante del alumno o alumna advirtiéndole
de los obstáculos.
-
Respetar
orden y ubicación en los lugares del aula y del centro.
-
Sentarse en
1ª fila frente a la pizarra, con el fin de e vitar sobreesfuerzos.
-
De espaldas a
la luz para evitar deslumbramientos o que le puedan afectar los reflejos de la
pizarra.
-
Identificarse
a la hora de dirigirse a él o ella, evitando las gesticulaciones.
-
Descripciones
precisas, detalladas. Al entregarle un objeto indicarle de qué se trata.
-
Respetar el
ritmo de trabajo. Ofreciéndole más tiempo para realizar la tarea.
-
Material
impreso con las aplicaciones especiales que él precisa con contrastes de
colores del papel (amarillo-rosa) evitando manchas, o brillos con letras Verdana o Arial a
espacio 1’5 si fuera preciso o si no tienen cegureatotal.
Esto es un
ejemplo de actuación y de un alumno con Necesidades Educativas Especiales, o
contemplado dentro de la Diversidad y que no necesariamente hemos de contar a
los alumnos a no ser surgiera en el debate y teniendo mucho cuidado que no
tengamos alumnos con este tipo de necesidades para evitar pudiera sentirse mal
o distinto.
A continuación desarrollaré el cuento deEl burrito albino que contaría a mis
alumnos y que serviría de introducción y ejemplo para desarrollar el debate.:
4.- Cuento El burrito albino
Uno de los objetivos de esta actividad es que
los niños sean capaces de dialogar entre ellos sin ninguna dificultad, para
ello trataremos uno de los temas que hemos de darle mucha importancia: la
diversidad. Para ello, una vez expuestas las pautas leeremos el cuento de“El burrito Albino”.Posteriormente y
atendiendo las normas de conducta ya establecidas pasaremos a realizar unauna
conversación-diálogo en el cual los niños irán aportando sin oponer sus ideas,
a partir de una serie de preguntas sobre el cuento y a la vez lo relacionare
con el tema que nos implica. Yo como maestra tendré que darles el turno de
palabra, en orden, asegurándome que se escuchan unos a otros.
El cuento es el siguiente:
Gaspar era un
burrito muy simpático y divertido. No le temía a nada ni a nadie. Tenía un
carácter jovial, alegre, era especial, diferente a los demás
burritos.
Por ser diferente todos los
animales lo miraban con desconfianza, y hasta con temor. ¿Por qué era
diferente? Cuando nació era totalmente de color blanco; sus cejas, sus ojos,
sus uñas, el pelaje, el hocico, todo era blanco. Hasta su mamá se sorprendió al
verlo.
Gaspar tenía dos
hermanos
que eran de color marrón, como todos lo burritos. Su familia a pesar de
todo, lo aceptó tal cual era. Gaspar era un burrito albino. A medida que fue
creciendo, él se daba cuenta que no era como los demás burros que conocía.
Entonces le preguntaba a su mamá por qué había nacido de ese color. Su mamá le
explicaba que el color no hace mejor ni peor a los seres, por ello no debía
sentirse preocupado.
- Todos somos
diferentes, tenemos distintos colores, tamaños, formas, pero no olvides,
Gaspar, que lo más importante es lo que guardamos dentro de nuestro corazón, le
dijo su mamá.
Con estas palabras,
Gaspar se sintió más tranquilo y feliz. Demostraba a cada instante lo bondadoso
que era amaba trotar alegremente entre flores, riendo y cantando. Las
margaritas al verlo pasar decían:
- ¡Parece una nube que se cayó
del cielo, o mejor un copo de nieve cayendo sobre el pastizal, o una bola de
algodón gigante!
Las rosas, por su lado opinaban:
- ¡Es la luna nueva que cayó a
la tierra y no sabe volver!
Cuando Gaspar salía de paseo por
los montes, las mariposas salían a su encuentro, revoloteando a su alrededor,
cual ronda de niños en el jardín; los gorriones, lo seguían entonando su
glorioso canto. Gaspar se sentía libre y no le importaba que algunos animales
se burlaran de él. De repente llegó a un arroyo y mientras bebía agua, los
sapos lo observaban con detenimiento y curiosidad y se preguntaban:
- ¿Y este de donde salió?, ¿Será
contagioso, un burro color blanco?, ¿o será una oveja disfrazada de burro?
Siguió su paseo, y
en el camino se encontró con un zorro que le dijo:
- Burro, que pálido eres,
deberías tomar sol para mejorar tu aspecto.
- Yo tomo luna, por eso soy
blanco, me lo dijo un cisne que nadaba en la laguna, respondió el burrito
inocentemente.
- ¡Qué tonto eres! Jajaja, eso
de tomar luna, es muy chistoso, jajaja, se burlaba el astuto zorro.
Gaspar no entendía dónde
estaba el chiste, porque él se creyó eso de tomar luna. Siguió su camino,
pensando en lo que le había dicho el zorro. Entonces decidió recostarse sobre
la fresca hierba bajo el intenso sol de verano. Transcurrieron unas horas en
las cuales, Gaspar, se había quedado dormido.
Después de un rato se
despertó, tan agobiado y muerto de calor que corrió a refrescarse en la laguna.
Cuando salió del agua, observó su imagen reflejada en ella y una triste
realidad, su pelaje seguía blanco como siempre. El cisne lo había
engañado. Los cisnes que lo miraban se reían de él.
- Que tonto eres, ¿crees
que poniéndose al sol su pelaje cambiará de color?, se burlaban.
Gaspar siguió su camino, y de
repente encontró frente a sus ojos, un paisaje muy bello que lo dejó atónito.
Se encontró en su lugar, su mundo. Todo era blanco, como él. Se metió más y más,
y empezó a reír y reír. Estaba rodeado de jazmines, por acá, por allá, más acá,
más allá, todo blanco y con un aroma embriagador.
- Gaspar, ¿Qué vienes a hacer
por aquí?, le preguntaron los jazmines.
-
Aparecí de casualidad, no conocía este sitio, le contestó Gaspar.
- Cuando te vimos de lejos
supimos que eras vos. Oímos hablar de vos, los gorriones y las mariposas nos
contaron tu historia. No debes sentirte triste por tu aspecto, míranos a
nosotros, deberíamos sentirnos igual, y sin embargo tenemos algo que nos
identifica, que no se ve pero se siente, es el hermoso perfume que emanamos,
que es único y hace que todos los días nos visiten cientos de mariposas y
pájaros, tan bellos como nunca vimos.
Comparten todo el día con
nosotros y no les importa si somos blancos o de otro color. Tú también tienes
algo que es más importante que tu color, que se percibe. Es tu frescura, tu
bondad y alegría. Cualidades que hacen que tengas muchos amigos verdaderos.
Debes aceptarte tal cual eres, para que te acepten los demás, le animaron los
jazmines.
Gaspar, recordó las
palabras de su mamá. Desde ese día se aceptó como era, y cosechó muchos
más amigos que no lo miraban por su aspecto, sino por lo que guardaba en su
gran corazón.
5.-
Conversación-diálogo, debate.
Una vez narrado
el cuento que hemos propuesto como excusa para hablar acerca de la Diversidad,
el profesor debemos de tener en cuenta una serie de recomendaciones o pautas a
seguir. Hemos de tener en cuenta que los alumnos muchas veces nos “admiran” o
nos tienen mucha estima en el sentido de aplicar o hacer lo que les digamos, o
como Mari Carmen Díez, autora de muchos ensayos de pedagogía dice que “nos ven
como una gran boca que habla y habla” y que debemos conseguir que ellos sean
una gran oreja que nos escuchen.Debemos conocer los alumnos que tenemos en
nuestra aula. Hemos de introducir el tema poco a poco con preguntas…¿os
ha gustado?...¿conocíais el cuento?...¿qué os ha parecido?... Con el fin de
fortalecer las exposiciones, o la participación de los alumnos debemos tener en
cuenta las siguientes recomendaciones.
-
No descalificar la acción de hablar ante los
alumnos con refranes que puedan perjudicar o se sientan afectados los niños
tales como…”Quien mucho habla poco
piensa”…”El silencio es oro”…Es más pedagógico educar en el respeto, en la
escucha y conocer los momentos en los que la participación es más adecuada.
-
No interrumpir las comunicaciones espontáneas
de los alumnos, haciéndoles ver formas más o menos cultas en el habla, ya que
ellos ante su espontaneidad las realizan de modo informal.
-
Interesarse por las experiencias reales
aportadas por los alumnos.
-
Favorecer un ambiente que favorezca la
conversación: hablar, escuchar, descubrir, expresar humor, imaginación, fantasía…
-
Enriquecer el vocabulario de los alumnos a
través de textos narrados o escritos y que nos puedan servir de complemento a
lo que estamos tratando.
-
Estimularlos a que tomen la palabra
-
Estimular el pensamiento creativo, divergente
-
Estimular a los alumnos a que aprendan a
aprender
-
Prestar atención para que unos alumnos se
escuchen los unos a los otros, que cada uno de los alumnos se sientan
escuchados.
-
Prestar atención que las pregunta cumplan con
los objetivos planteados y que se agoten las ideas antes de introducir una
nueva.
-
Que se genere un diálogo siendo el profesor el
auténtico mediador de la actividad.
-
Hacerles ver que antes de hablar piensen la
respuesta o lo que van a decir.
Terminado en cuento o la narración y
teniendo en cuenta las anteriores indicaciones a seguir, pasaríamos a introducir
la conversación-diálogo o debate.Introduciéndolo como he dicho anteriormente
poco a poco. El guión o preguntas que podría tener ya preparadas podrían seguir
la siguiente batería de preguntas:
¿Os
ha gustado?
¿Conocíais
el cuento?
¿Qué
os ha parecido?
¿Por qué le consideraban al burrito
Albino diferente?
¿Hay algún personaje en la historia
que fuera también diferente?
¿Uno es más que otro por el aspecto
externo? O…¿por cualquier cualidad?
¿Nuestros padres nos quieren como
somos? O… ¿nos querrían más por qué fuéramos de otra forma?
Te sientes identificado con el Burrito
y eso por qué?
¿Tenéis amiguitos que puedan tener
alguna cualidad o aspecto para que se puedan considerar distintos o sentirse
mal?
¿Qué debemos hacer ante una situación
de diferencia como la que ocurre al burrito albino? ¿Qué haríamos?
¿Todos somos iguales?
Estas
podrían ser una serie de preguntas, cuestiones o ideas para introducir o guiar
el debate o conservación, realizando yo el papel de moderador, dando la palabra
aquellos que levanten la mano, y teniendo en cuanta las anteriores
explicaciones que he aportado. Puede ocurrir y ocurre que todos los alumnos por
timidez, o por no saber qué decir, o por tener miedo, o sentirse cohibidos por
los muy habladores o participantes, no digan nada o no expresen nada.
Para
solucionarlo podría poner en práctica una de las técnicas que aprendí este
verano en el curso de monitor impartido en mi ciudad natal fue la de: bola
que vuela. De lo que se trataba que todos los alumnos participaran por
igual. Para ello me sirvo de una pelota de goma, o un trozo de tiza o una bola de
papel, un pequeño muñeco, lo primero que tengamos a mano en la clase. Debemos
de intentar que no pese mucho para que no se hagan daño los niños. Cuando
comencemos la actividad, debemos de tener la pelota de goma o el objeto que
haya elegido. Lo que haré será lanzarla suavemente a alguno de mis alumnos. El
alumno que lo recoja será el que empezará hablando y cuando termine su turno de
palabra se lo lanzará a otro de sus compañeros pero antes tendrá que
nombrarlo.Este procedimiento de pasar la pelota de goma de un compañero a otro
se realizara tantas veces como haga falta, es decir, hasta que todos los niños
hablen.
Pero
es muy importante favorecer el intercambio comunicativo con aquellos
alumnos tímidos, sin ponerlos en evidencia, dándoles confianza, preguntándoles
cosas que sabemos positivamente que ellos saben contestar o que conocen.
Al tiempo,
llevaré un registro e iré anotando quién ha hablado para asegurarme que todos
han participado.
Esta forma
de participar no les hará sentirse demasiado incómodos ya que es como una
especie de juego; a los niños les llama la atención y les divierte.
Pueden darse la circunstancia de que tengamos niños
que esté molestando continuamente o que no respeten las normas. Cuando tenemos a un niño que es irrespetuoso dentro del
aula podemos realizar unos cuantos actos:
-Puede ser eficaz darle protagonismo
pero de forma positiva.
- Se le puede nombrar
responsable para realizar algunas series de actos en el momento de la asamblea,
es decir,será el que dice el nombre para el turno de palabra, o el responsable
de apuntar los que habían hablado en el dialogo y luego al pasar un tiempo se
lo dirá a la profesora.
- El refuerzo positivo
oral por parte del profesor, es muy importante, es decir, hacerle ver cuando
realiza bien las actividades.
Estas tareas ayudarán a
que se sienta importante en clase, por lo que ya no necesitará molestar
continuamente e interrumpir clase.
-
También
los muy habladores, o “sabelotodos” hay que impedir también de alguna forma que
monopolicen las actuaciones, pidiendo a los demás que opinen, y haciéndoles ver
a éstos que deben aprender a respetar turnos y ordenes de actuación, limitando
sus intervenciones.
En
cuanto a la evaluación, elaboraré una tabla para ver si el niño es
capaz de escuchar con atención a sus compañeros y si participa o no con los
siguientes ítems:
-Escucha
a sus compañeros.
-Ha
participado voluntariamente
-Ha
mantenido la calma en el diálogo y ha entendido el cuento
-Ha
intervenido cuando uno de sus compañeros hablaba
-El
volumen de la voz es adecuado
-Ha
tenido miedo o vergüenza
- Ha
mantenido una actitud correcta durante el dialogo
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ALUMNO 1
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ALUMNO 2
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ALUMNO3
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-Escucha a sus
compañeros.
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Ha participado
voluntariamente
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-Ha mantenido la calma
en el dialogo y ha entendido el cuento
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-Ha intervenido cuando
uno de sus compañeros hablaba
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-El volumen de la voz es
adecuado
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-Ha tenido miedo o
vergüenza
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- Ha mantenido una
actitud correcta durante el dialogo
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*SERA
EVALUADO DEL 1 AL 5, EL 1 COMO MENOR Y 5 SI LO CUMPLE AL 100%
6.- Bibliografía.
- Apuntes
de Didáctica de la Lengua Española. De Irune Labajo.
Estupendo, Paula, incluye una tabla para que los niños también puedan autoevaluarse y estará perfecto.
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